Mi invitado de hoy, decidió hace cuatro años coger un micro con la bonita intención de hacer reír al mundo, algo destinado creo que solo para los valientes… Y para ello, entre otras cosas, se formó en la Escuela de las Artes de la Comedia y en el Liceo de la comedia. Creó junto a Diego Daño y Eva Soriano la compañía Golfos, y al lado de Nacho García, se sumergió en la aventura de fundar en Madrid, El Golfo Comedy Club.
Y aunque dice que lleva una corta trayectoria, ya ha formado parte del espectáculo Cuatro Motes Manchegos con el cual continúa girando después de tres temporadas. Ha ganado diferentes premios en concursos de monólogos y ha colaborado en los programas radiofónicos Cuerpos especiales de Europa FM y Despiértame Juanma, en Melodia FM. Sin olvidarme de uno de los programas de televisión que más echo de menos como es Late Motiv, en donde daba vida a entre otros personajes, Franchesco Di Samba, y en Showriano, el nuevo programa de Eva Soriano para Movistar+ en el que actualmente se encuentra de colaborador.
Hoy, tengo la suerte de conversar por primera vez con Fran Pati que viene a este patio de butacas a presentar su nuevo espectáculo, Moder-No con el que estará en Rambleta el próximo 1 de abril.
Muchas gracias por tu visita Fran.
¿Cómo estás?
Bien, con muchísimo trabajo. Porque tengo que contarte que además de seguir con la gira de Cuatro Motes Manchegos con la que ya llevamos cuatro años, hemos sacado también el podcast de La España Vaciada, del que también estamos intentado sacar el show. ¡Así que imagínate! Esto es un no parar, porque además el podcast lo grabamos en el Golfo Comedy Club. Además lo hemos sacado a pueblos y está funcionando muy guay.
Y junto a todo eso, también estoy con la gira de Moder-No con el que salgo por primera vez de Madrid y visitaré Rambleta en Valencia. Y aparte hace una semana hemos estrenado en Movistar+, el programa Showriano en el que estoy de colaborador. Así que como puedes imaginar, estoy llenísimo de trabajo pero agradecido porque he peleado mucho por llegar a este punto.
Hablaba en tu presentación de tu nuevo trabajo, Moder-No ¿cómo nace este monólogo?
Nace de la acumulación de textos (ríe). Cuando empiezas a actuar no tienes mucho texto creado, entonces vas sumando hasta que crees que es el momento de dar ese paso natural en el mundo de la comedia, como es el actuar solo con tu propio show.
Y también tiene que ver un poco con mi llegada a Madrid hace ya ocho años cuando dejé mi pueblo, La Roda (Albacete) para aventurarme en la comedia. Mi texto nace de alguien de pueblo que se viene a la ciudad, que aunque pueda parecer muy clásico, las comparativas que yo hago son muy actuales y no lo típico que se ha hecho siempre.
De hecho, el nombre del espectáculo es Moder-No, porque en la ciudades grandes los ritmos son otros y parece que se te exige un poco entrar en esa jungla de los nuevos tiempos y en la actualidad, pero luego están las costumbres de toda la vida como las que se tienen en los pueblos. Y ese contraste es el que me llevó a crear este show.
Ha sido dos temporadas en Madrid, básicamente en el Golfo Comedy Club y también estuve en La Chocita del Loro. Ahora en esta temporada de la mano de la productora, MPC Management, estamos sacando el show fuera de Madrid a ver qué pasa…
El día 1 de abril nos encontraremos por Valencia porque visitarás uno de los sitios culturales más emblemáticos de la ciudad como es Rambleta ¿Cómo está siendo esta cuenta atrás?
Tengo muchas ganas porque el show ya lo probé en Valencia en una sala pequeñita de un bar que acogía solo a cincuenta personas, pero cuando saqué las entradas se vendieron tan rápido que tuvimos que sacar dos pases. Así que me hice dos monólogos seguidos para poder meter a cien personas.
La acogida en Valencia a mi me encanta porque el levante lo que tiene además, es que viene mucha gente de mi tierra, y a esta ciudad siempre le ha gustado mucho el humor manchego. Con Cuatro Motes Manchegos estuve dos o tres veces y probando mi show en solitario también… Y todo eso es lo que nos ha llevado a Rambleta de nuevo con este trabajo y ojalá que mínimo tenga esa acogida que tuve con el doblete antes de la Navidad.
Entonces lo que son nervios de cuando vas a una ciudad nueva a ver qué pasa ya no los tengo. ¡Los de Valencia ya me los he quitado! (ríe). Ahora son ganas de llegar y disfrutar porque siempre me lo paso muy bien allí.
Para aquellas personas que tengamos curiosidad por saber cómo se levanta tu monólogo… ¿podrías explicarnos cómo ha sido el proceso de creación de Moder-No? ¿Es un texto que sigue en continuo cambio o cómo es su evolución?
Cada cómico aquí te podría contar una historia, pero la base que tenemos todos es escribir tus textos y probarlos en Open’s. Yo por ejemplo soy uno de los presentadores del Open del Golfo Comedy Club, y hay otros por Madrid, Valencia…
Tú escribes, los pruebas en los micros abiertos para ver la reacción de la gente y al final vas testeando y puliendo hasta que tengas el chiste perfecto que vaya al show. Luego la historia también se va modificando, pero en mi caso es más por no aburrirme yo (ríe) , porque en cada show cuentas lo mismo, y más yo, que lo llevo muy estructurado para que quede perfecto… Por eso, al final cuando voy a una ciudad quito algo y pongo otra cosa, amoldando el texto, cogiendo cosas de allí y hablando con el público para pasármelo bien. Yo a veces me lo paso mejor que ellos (ríe).
Algo que siempre agradece el público es hacerles mención a su ciudad…
Sí, es que si les hablas de cualquier cosa de allí, ya saben que mínimo has hecho un trabajo de investigación y que has invertido tu tiempo y tus fuerzas en dedicarle esos chistes y esas menciones. Y eso obviamente el público lo agradece.
Creo que desde fuera no somos conscientes todavía de todo el trabajo que hay a la hora de levantar un texto, porque por ejemplo con ‘Moder-No’ entre que lo escribes, testeas, sales… ¿cuánto tiempo llevas tú sumergido en él?
Yo creo que es más que nada por la costumbre cultural que tenemos sobre el monólogo y el Stand Up Comedy que hay en este país porque es muy joven todavía. Solo tenemos una primera hornada que puede venir a lo mejor desde Gila, pero que como estaba muy mezclado con cuentachistes la gente no lo tiene muy claro. Luego llega El Club de la Comedia que es el formato más americano y donde ya empezamos a descubrir a Dani Rovira, Leo Harlem, Goyo Jiménez… Y ahora parece que hay una tercera hornada con la gente que estamos viniendo. Pero no hay muchas más generaciones, tres o cuatro nada más.
Hablando con la gente, ocho de cada diez piensan que nosotros nos subimos ahí y decimos lo primero que se nos pasa por la cabeza… Pero el texto de ‘Moder-No’ desde que decidí que estaba pulido, listo para hacerlo en solitario durante una hora y cuarto más o menos, y que estuviera perfecto para que el público comprase una entrada han llegado a pasar seis años.
Es que yo nunca me he atrevido a escribir cuatro cosas y a salir pensando que ya tenía un show. He trabajado con Cuatro Motes Manchegos y con Golfos mucho, lo que me permitió que en el poco tiempo que tenía que eran quince o veinte minutos, fuese acumulando y cambiando textos, hasta que por acumulación de lo que me gustó y creí que era lo mejor, pensé que se podía llevar al público.
Es verdad que desde la pandemia ha habido un cambio debido a todo el contendido de redes sociales que se consumió en el confinamiento. Se está notando un cambio. Ahí se descubrió a mucha gente y ahora ha habido un resurgir de caras nuevas, yo entre ellas, que se han descubierto y a quienes la gente quiere ver en los teatros.
Comentábamos al principio que hace 4 años que te lanzaste a coger el micro… ¿Hubo un click que te dijese que era el momento o de donde nace este bonito camino?
Coincido mucho con otros compañeros de la comedia en eso de que todos tenemos esa parte de que éramos el gracioso de la clase y yo con mis amigos siempre he llevado la risa por bandera.
Pero recuerdo el día que descubrí en un bar de mi pueblo los monólogos gracias a dos chicos… Ahí vi que eso que hacían no era contar chistes, que estaban contando historias y anécdotas. Y eso me llamó tanto la atención que lo intenté con 19 años, viniéndome a Madrid a probar, pero no se me dio bien y pensé que no valía para eso.
Terminé mis estudios, estuve trabajando y monté mi propia empresa, pero tenía una espina clavada que no se iba. Y aunque parezca un cliché, es verdad eso de que vida solo hay una, y yo quería hacer lo que realmente me gustaba. Y después de que pasasen ocho años, ya con 28 años, lo dejé todo, cerré la empresa y me vine a Madrid a trabajar.
Luego, la información también en internet era otra y entonces descubrí escuelas de comedia que a lo mejor antes no existían, técnicas de escritura para comedia… Y me fui formando, estuve en dos escuelas, hice varios cursos, comedia gestual con Yllana…
Ahora llevo ocho años dedicándome a la comedia, cuatro años como profesional pudiendo vivir de esto. Pero han sido ocho años todos los días a pico y palo, inventando, escribiendo, viendo a otros compañeros, viajando… Al final adquieres un estilo de vida que cuando lo coges ya no lo sueltas porque son veinticuatro horas al día y los siete días de la semana.
Muchas veces no somos conscientes de que la cabeza de las personas creativas siempre están sin descanso, improvisando y apuntándolo todo. Que el arte es un trabajo constante…
Totalmente. Si, ahora tú estuvieras en mi casa verías libretas y bolígrafos por todas las habitaciones (ríe).
Y ahora porque el show está muy cerrado y me pasa menos, pero antes cuando te encuentras buscando y buscando… te llegas a despertar a media noche cuando estás durmiendo porque se te ocurre algo y coges la libreta de la mesita de noche y la apuntas.
Ahora mismo el proceso creativo está más relajado, es más el día a día, lo que te cuentan o cosas que me pasan a mi pero que exagero… Mi texto está basado mucho en historias reales que me han pasado pero luego para buscar el punto de comedia las exageras o les metes otros elementos, pero yo me baso mucho en historias reales porque así llegas más al público y más gracioso eres siempre.
Cuando ya las luces del patio de butacas están apagadas y comienza la cuenta atrás… ¿qué sientes justo antes de salir al escenario?
Al principio eran nervios en plan ¿qué cojones hago yo aquí? (ríe) y ahora sigo con ese nudo en el estómago pero no de nervios, sino de ganas de salir ya al escenario, de inquietud, de querer coger ese micro y darle a la gente lo que quiere (ríe).
En esos momentos previos, normalmente me concentro mucho, repaso mi texto, me pongo en el que llamo modo focus y me convierto en otra persona… Estoy evadido y transformándome en Fran Pati que es quien va a salir al escenario.
Te descubrí en ‘Late Motiv’ en una actuación junto a Eva Soriano y Soul Vayainas Feat. Francesco Di Chamba interpretando ‘El Pigmentón’ y ahora además podemos verte también en ‘Showriano’, en Movistar+. Con tu permiso, me gustaría preguntarte por quien para mi es una de las mujeres más inteligentes y con una agilidad mental cómica admirable como es Eva Soriano… ¿Qué te ha aportado a tu faceta como cómico ella?
Eva es mi hermana. Nos conocimos en la Escuela de Arte de la Comedia, empecé a hacer monólogo con ella y hemos estado trabajando juntos muchos años. Siempre ha tirado de mi. Estamos muy cómodos juntos, es un trabajo que no es trabajo porque somos dos amigos y por eso también, las cosas salen así, porque nos salen las tonterías nuestras que por suerte a la gente le hace gracia. Es una complicidad a la que a ambos nos ayuda bastante.
Ella después de la pandemia con su vuelta a Late Motiv, se vuelve imparable demostrando que va a más. Y junto a ella he escrito mucho, le he ayudado con sus guiones en Late Motiv y he ido cuando me lo ha pedido… De hecho por ejemplo, el personaje de Francesco Di Mancha, fue una movida que nos inventamos en el AVE de Barcelona a Madrid y que fuimos haciendo en el vagón bar aprovechando que como era la pandemia ese vagón estaba cerrado y ahí nos pusimos a bailar… Y claro, la gente estaba flipando.
Además, siempre ha puesto mi nombre sobre la mesa. Presentó mi nombre a El Terrat, la productora que está haciendo el programa para Movistar+ y justo había gente como la jefa de producción Lidia Cernudo que de casualidad me había visto actuar en el Golfo Comedy Club y le encanté… Y ese cúmulo de cosas, del trabajo, de los jefes que mandan y lo que ha tirado Eva de mi porque quiere que trabaje con ella, al final se han unido todos esos ingredientes y ahí estoy.
A Eva el año pasado le dieron el premio a la mejor cómica de este país y muy difícil será que esta temporada no se lo den de nuevo. Ya ha demostrado que es imparable. Tiene un programa de radio diario por el que se levanta a las 6 am, tiene un programa de televisión con su propio nombre en una plataforma como Movistar+ y también su propio espectáculo que aunque está parado, ya está creando otro nuevo… Esto no es llegar y ya está, no. Así que chapó por ella y yo todo lo que sea ayudarla y estar con ella, yo encantado de la vida…
En todos estos años durante este viaje desde que sales de tu tierra y llegas a Madrid con las subidas y las bajadas ¿has tenido algún momento de decir: No me merece la pena, me vuelvo?
No, no. Nunca. De hecho, a mi me vinieron pronto lo que llamamos «Las hostias» que es cuando sales al escenario y no se ríe nadie.
Y a mi eso me pasó de salir a un escenario un día en Malasaña con doce personas delante solo y durante ocho minutos nadie se rió de nada. Solo se oía el aparato de aire acondicionado y ahí es cuando sientes eso de: Tierra trágame. Incluso empecé a reírme de que la gente no se reía, me lo tomé como a cachondeo y seguía soltando chistes pero nadie se reía. Ese fue como un punto de inflexión en donde vi que no siempre iba a ir bien, sobre todo cuando empiezas y tienes que probar cosas. Y sinceramente, en parte me fui contento a casa por darme cuenta de que no pasaba nada.
Y otra vez en el teatro Las Aguas que fue la única vez en mi vida en donde me quise bajar del escenario… Probé a improvisar con alguien del público y empezó a darme hostias por todos lados que yo ya no sabía ni donde venían. ¡Quise huir del escenario!
Pero al final esto es parte del trabajo y cuanto más actúes y más trabajes, mejor va a ir y eso me lo puse como regla principal. Así que he hecho muchos Open’s, escribo y trabajo mucho todos los días porque como dicen, cuanto más horas de vuelo hagas, mejor piloto vas a ser. Y siempre he intentado rodearme de los mejores cómicos de este país, porque al final aprendes muchísimo más fuera de los escenarios hablando con esa gente que lo que puedas ver o deducir que están haciendo arriba.
Y otra de las preguntas que siempre hago y que espero que sea la primera de muchas más veces que te la haga, que es el cuestionario cultural. Donde me gusta preguntaros recomendaciones para retroalimentarnos y aprender los unos de los otros. Me gustaría que me recomendases:
- Un libro que te estés leyendo o te hayas leído hace poco: ‘Subidón’, una novela de Joaquín Reyes. Y lo que más leo son los libros de motivación y el último que he leído es ‘El sutil arte de que casi todo te importe una mierda’.
- Una serie que estes viendo últimamente y te esté gustando: ‘Pobre Diablo’ en HBO, una serie de animación de Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla y Miguel Esteban.
- Una película: hace poco me puse otra vez, ‘Coyote Ugly’.
- Una obra de teatro que hayas visto: ‘El Cascanueces’ en el Teatro Príncipe Pio.
Muchas Gracias Fran por tu tiempo y por visitar este patio de butacas. Recordamos que estarás en Rambleta el día 1 de abril con tu nuevo espectáculo Moder-no, para el que ya están disponibles las entradas. Pero además, también podemos reír contigo en Madrid en el Cinesa Fuencarral.