Álvaro Morte: «A la cámara no hay quien la engañe»

00

Son las 17.00h, me encuentro en el Reina Victoria de Madrid porque he quedado con el actor Álvaro Morte para hablar sobre su próximo trabajo «El Perro del Hortelano», sobre su futuro y sobre Ay Carmela! musical del que forma parte y del cómo ya sabréis todos en la anterior entrada me declaré fan absoluta y recomiendo sin cesar.Ha llegado Álvaro y decidimos irnos a un cafetería cercana al teatro. Tras buscar un buen sitio y ponernos un poco al día, encendemos la grabadora y nos ponemos a chalar. Hablamos sobre todo en lo que actualmente se encuentra inmerso, de sus miedos como actor, su formación en Finlandia  o los trabajos que más le han marcado.

Recordaros que Álvaro tiene un amplio currículum y que ha tocado todos los palos posibles dentro de la interpretación. En televisión le hemos podido ver en series como Aída, Hospital Central o Cuéntame cómo pasó, pero quizás su trabajo más destacado fue en la serie de Antena 3 TV, Bandolera, dando vida al personaje de Adolfo Castilla.

Ha realizado numerosas giras teatrales junto a muchos de los más grandes de este país como Concha Velasco, Ángela Molina o Pepe Sancho. Pero no sólo de ser actor vive nuestro protagonista de hoy, si no que también realiza las labores de director, tanto en su propia compañía 300 Pistolas como en diferentes obras teatrales: La Casa de Bernarda Alba, Otelo o El Paño de Injurias han sido alguna de ellas.

Álvaro Morte ha obtenido numerosos premios como el Premio al Mejor Actor Europeo en el Certamen Internacional de Cine y Video de Málaga Eurovideo. Premio a Mejor Actor en el Certamen Internacional de Cortometrajes del País del Bidasoa o el Premio a Mejor Actor de Comedia en el Festival de Cortometrajes de Vila de Noia.

Y ahora, ya sí, tras esta breve introducción, os dejo la entrevista que tan amablemente me concedió Álvaro y con la que tanto pude disfrutar.

Ya queda menos para que tu versión de «El Perro del Hortelano» se estrene en Madrid ¿Cómo te encuentras ante la espera?

Estamos toda la compañía muy emocionados porque es la primera vez que se va a estrenar en Madrid. La hemos estrenado previamente en el Festival de Teatro Clásico de Almagro, hemos estado en Paris, hemos estado en Garnacha en el festival y demás… ha funcionado muy bien y estamos deseando. Sabemos que hay mucha gente en Madrid que quiere verla y tenemos muchísimas ganas de ponerla. Estamos deseando que llegue el día 3 de junio, que suba el telón y ver como es la reacción de la gente, que esperamos que sea buena. Siempre es muy gratificante no? ojalá, escuchar las carcajadas del público y los aplausos aquí en Madrid.

¿Qué puedes contarnos de esta nueva versión de «El Perro del Hortelano»? ¿En qué se diferencia de las otras?

Pues mira, a mi lo que me ha interesado es mostrar como yo creo que se hacían de verdad las obras de teatro en el Barroco, en el siglo XVII. Se hacían en un corral de comedias, Lope escribía para el pueblo llano y para gente con un nivel cultural bajísimo, etc… Entonces la gente llegaba al corral de comedias y estaba charlando, comiendo, bebiendo, peleándose en el coso y el actor tenía que llamar la atención desde el escenario, no había ni cuarta pared ni naturalismo ni nada por el estilo.

Los personajes estaban estirados y tenían que luchar contra el público, luchar entre comillas contra el público que estaba ahí, luchar para llamar su atención no? por lo tanto era un teatro como muy estirado y demás, tenía que ser muy divertido. Si yo soy el del pueblo, vengo al teatro y pone el cartel que es una comedia, yo me quiero estar riendo al minuto tres, si no hay algo que no funciona. Entonces, intentamos tirarlo por ahí, pensamos cómo hubiera representado una compañía de cómicos pobres de la época «El Perro del Hortelano» y ese fue el camino que tomamos. Avanzamos por ahí y dijimos con cuatro cosas que tuvieran harían esto, harían varios personajes y demás… ese fue el germen para trabajar y esa es la versión que nos ha salido.

Esta versión la vas a hacer con tu compañía 300 Pistolas. ¿Cómo surgió la idea de formar esta compañía?

Surgió porque hay veces… en las que te ves obligado a hacer un trabajo en el que luego llegas a casa y dices: Joder me hubiera gustado poder sacar un poquito más de esto un poquito más de aquello… Si trabajas por ejemplo en televisión, en series diarias y demás, que hay un volumen de trabajo impresionante y no te da tiempo a trabajar el personaje todo lo que tu quisieras, porque claro lo vas haciendo todo lo bien que puedes con toda la honestidad y el cariño que puedes hacer ese personaje, pero muchas veces dices: Joder si hubiera tenido media horita más para trabajar esto, si hubiera tenido un poquito más de esto, si hubiera tenido tal.. entonces 300 Pistolas surge precisamente por coger y decir: Oye y si montamos un proyecto en el que nosotros estemos contentísimos con lo que estamos haciendo, vamos a hacer  un laboratorio con esto y vamos a coger un texto que nos guste y tirar para adelante y ver a donde llegamos. Sin ningún tipo de presión y sin nadie que nos diga esto tienes que hacerlo así o eso tienes que hacerlo asá. No tenemos ningún tipo de subvención por lo cual no tenemos que dar explicaciones a nadie (risas) y fue por esto, por decir vamos a hacer algo realmente que sea de calidad para nosotros en cuanto a que tu estés a gusto en lo que estás trabajando y estés contento y nos lo pasemos de puta madre encima del escenario. Además si tu te lo pasas bien estando en el escenario, el público se lo va a pasar bien siempre, y fue un poco lo que fuimos buscando.

El primer proyecto fue «El Perro del Hortelano» y yo recuerdo que claro, yo como director hice la adaptación y recuerdo cuando tengo la primera reunión con Sara Gómez, Anna Hastings y Esteban Jiménez que son los otros tres actores que están conmigo, y empezamos a hacer las primeras lecturas… claro ellos estaban acostumbrados al clásico normal , todo muy encorsetadito, muy serio, todo muy bien dicho y sin embargo nosotros hemos hecho una versión muy gamberra, en el buen sentido de la palabra de «El Perro del Hortelano». Yo les decía: No, esto de esta forma, esta de aquella… y se miraban entre ellos como diciendo… este tío está chalado!. Pero bueno, confiaron, confiaron y al final pues ha salido este proyecto tan chulo.

¿De dónde viene el nombre 300 Pistolas?

Pues mira, 300 Pistolas surge también de un clásico, aunque parece que es un nombre sacado de Tarantino… sale de Los Tres Mosqueteros de Alejandro Dumas. Hay un momento en el que D’artagnan tiene que ir a Londres a recuperar los herretes de la Reina y tiene ir y volver en 24 horas a caballo, en aquel entonces imaginate, muy complicado, una aventura muy difícil, muy cuesta arriba porque además tenía a los soldados del Cardenal Richelier intentando joderles el camino, y entonces antes de emprender el camino, El señor de Trevill, que es el jefe de Los Mosqueteros habla con D’artagnan y le dice: Un momento, a ver tío, esto que vais a hacer es una locura, esto es un aventurón muy muy fuerte, tienes dinero para enfrentarte a esto? entonces D’artagnan le responde: Sí, tengo 300 pistolas. Y es que las pistolas en aquel entonces era una moneda que equivalía a los escudos. Entonces juega al doble sentido de Sí, tengo dinero y tengo mucho valor también para enfrentarme a esto. Y entonces el Señor de Trevill le responde: Ah! bueno vale, si es así, Id pues porque así se puede llegar al fin del mundo… Y como nosotros queremos llegar al fin del mundo… (risas)

Tu eres entonces el Diretor, productor y parte del elenco de 300 Pistolas… ¿El 21% os está afectando?

Nos está afectando a todos, aquel que no diga que no le afecta miente. Esto ha sido un varapalo brutal. Hay muchísimas compañías que se están cayendo, nosotros ahora mismo los bolos que estamos haciendo y demás no estamos sacando un dinero para que la compañía pueda ir teniendo un beneficio. Estamos cubriendo gastos y poco más. Hay veces que te quedas más corto. Ha sido una cosa nefasta. Si esto sigue así se van a cargar el teatro en este país Sí o Sí. Es una cosa muy muy muy grave, nos afecta muchísimo a todos los niveles.

¿No hay buenas expectativas de cambio?

De momento no. Ojalá las hubiera. Ojalá se retractaran de todas las decisiones que están tomando, pero de momento no están machacando bastante con el aumento del IVA, con el hecho de que los sitios que te contratan, Ayuntamientos y demás, no te pagan cuando tienen que pagarte… Osea ahora mismo es un problema que te llamen de tres sitios para trabajar, porque tú la inversión de llegar al sitio, trasladar la compañía, pagar un hotel, unas dietas, unos sueldos, etc. la asumes tú como compañía pensando que luego que ese ayuntamiento te va a reportar ese dinero, pero claro si ese ayuntamiento tarda un año en pagarte, a ti te salen 3, 4 o 5 bolos y tu tienes que adelantar todo ese dinero… llega un momento que dices: Es que no puedo. Tengo que dejar de hacer bolos porque hay otros sitios que no me han pagado.

Poniéndonos un poco más positivos, estrenáis en Junio en Madrid «El Perro del Hortelano» y luego vendra «Tres sombreros de copa». ¿Cómo se presenta?

Estamos entusiasmados con «Tres sombreros de copa». Es unan cosa que está todavía en proceso, estamos todavía mirando y demás… hemos hecho un preestrenito pero bueno no te diría que está terminada. Además yo soy muy puntilloso, me gusta que todo esté muy muy hilado, pero si es verdad que lo que hemos hecho a la gente le ha gustado muchísimo.

A la hora de enfrentarnos con «Tres sombreros de copa» de la misma forma que cuando nos enfrentamos con Lope intentamos estudiar que le pudo influir a Lope en ese momento para escribir  «El perro del Hortelano», por qué escribió ese texto, por qué puso esos protagonistas, por qué definió esos personajes y esas tramas en lugar de otros. Intentamos inspirarnos en el teatro que se hacía en la época, que pudo haber estudiado o visto Lope, y de esa forma surge nuestro Perro del Hortelano. Entonces con Miura hemos hecho lo mismo y ha sido muy gratificante porque nosotros por ejemplo vemos que él  lo escribe a principios de los treinta, pero se estrena mucho más tarde, entonces vemos… vale, que le ha podido influenciar a él? entonces vemos los grandes cómicos de la época, Los hermanos Marx, Harold Joy, era Chaplin, era Buster Keaton, etc. Entonces dijimos y si esto estaría conectado con esta gente de alguna forma? pues bien, estudiando y estudiando, nos hemos dado cuenta no sólo que a Miura le encantaban los Hermanos Marx si no que el llegó a dirigir el doblaje de Una noche en la Ópera. Entonces de repente fue como un bombazo decir chicos vamos por el buen camino.

Estamos muy contentos con la reacción que está teniendo el público,  pero de Tres sombreros» ya os diremos cuando esto salga bien vamos a bombardear ahí estupendamente…

Eso es lo que vendrá en verano, pero ahora estás con el musical «Ay Carmela!» que no para de recibir buenas críticas.

La verdad que sí, estamos muy contentos. Es un trabajo que como ya sabes ha dirigido Andrés Lima. Estamos con Javier Gutierrez, Inma Cuesta, Marta Ribera, Javier Navares, Javier Enguix, Pablo Raya y Sagro Mielgo está de cover. Y ha sido un proceso durísimo de ensayos, hemos estado dos meses y pico ensayando. Andrés Lima es un maestro del matiz, tiene un control perfecto para saber llevarte del drama a la comedia y de la comedia al drama en un abrir y cerrar de ojos. Yo he aprendido muchísimo con él como director y desde luego la gente sale encantada del teatro. Entiendo que nada puede gustarle a todo el mundo, pero vamos lo que nosotros estamos viviendo aquí es que la gente por regla general sale contenta, bueno contenta… es Ay Carmela! (risas) No, pero sale muy contenta de haber visto un espectáculo como el que tenemos aquí.

Andrés Lima es el director de la obra, uno de los directores más premiados de este país. ¿Qué es lo que más te gusta de trabajar con él?

Que es puntilloso, y que es un tipo muy original que no se queda en lo primero que da el texto, que a lo mejor estás haciendo algo que es un drama y te dice: empieza a reírte y tú… y él: Empieza a reírte y de repente empiezas a reírte y ves que funciona. Es un tipo que va un poco más allá, que tiene una concepción del teatro, una sabiduría teatral abrumadora, que tiene muy claro lo que quiere. Y cuando te pones en mano de alguien que sabe lo que quiere siempre te sientes más seguro. Ha sido muy duro pero muy gratificante trabajar con él.

Teatro, Cine y Tv, has tocado todos los palos. ¿Qué te aporta cada medio?

Cada cosa tiene su punto bueno y su punto malo. A mi me gusta mucho el teatro en base sobre todo a lo que es la creación del personaje, el llegar a… todo el proceso de ensayo, el descubrimiento, el probar por aquí, por allá y demás. Luego se disfruta mucho ejecutando. Pero lo que más me gusta es el cómo llego a cómo es este personaje y el contacto directo con el público cuando estás ahí representando me parece maravilloso. En el perro por ejemplo hacemos un contacto muy directo con el público, hablamos directamente a la cara y ver las reacciones que tienen y demás a mi es de lo que más me gusta, porque además te puedes permitir jugar con lo que te da el público con lo cual es una cosa que siempre está viva.

La televisión tiene un punto de inmediatez que también tiene su historia. Hace falta mucha valentía para enfrentarse a ocho secuencias diarias en una serie, que a lo mejor te recogen a las 6 de la mañana para empezar a trabajar y te sueltan en tu casa a las 7 de la tarde, y al día siguiente tienes otras ocho secuencias que hacer y tu vida deja de ser vida para convertirse en un tormento maravilloso (risas) pero bueno cuando estás ahí.. venga y otra y otra y notas también normalmente que están ahí los compañeros, luchando para sacar este proyecto hacia adelante porque crees que merece la pena y tal.

El cine, si que te puedes permitir, no siempre, pero te puedes permitir algún ensayo con el director , pero tienes tiempo, tienes todo el guión de principio a fin. No pasa como en televisión que te lo van dando por capítulos, pero tienes todo el guión para poder prepararte el personaje. Necesitas tener muchísima verdad, es un reto que tengas un plano muy cercano, que tengas un primer plano, que no hace falta que hagas nada, con que lo pienses muchas veces ya se está reflejando en tus ojos, en tu respiración, en cómo haces las cosas… y no puedes engañar. A la cámara no hay quien la engañe nunca. Y también es un reto, y a mi todo lo que sean retos me gusta muchísimo (risas)

¿A qué le tienes miedo como actor?

Bueno… a mi el miedo no me importa, a mi el miedo me gusta porque te enseña las cosas que tienes que superar. Te enseña un camino para poder avanzar y poder crecer. Yo tengo miedo a muchas cosas, pero es un miedo sano, llámalo miedo llámalo respeto. Pero el que yo tenga miedo a algo.. el problema sería que ese miedo me anulara y me dejara sin hacer cosas, pero bueno yo tengo un carácter que si algo me asusta voy a por ello y voy a intentar pasar por encima y voy a superarlo. Y a partir de ahí pues habrá otra cosa que me de miedo pero vamos a intentar superarlo. Yo el miedo intento gestionarlo de esta forma.  Por lo tanto miedo a cosas concretas no tengo afortunadamente, pero sí los pequeños miedos que te hacen ir creciendo cada día y tirar para adelante. Creo que el miedo es sano si se sabe gestionar.

¿Las cosas que vives se ven reflejadas en los papeles que interpretas?

Procuro que no. A mi me gusta definir la interpretación como el arte de mentir, yo procuro no hacer las cosas en ese sentido de verdad. Yo no me llevo mi vida personal al escenario nunca y viceversa. No dejo que según que caracteres de personajes me puedan influir y demás. A mi me gusta que todo sea muy mentira pero que el público llegue a recibirlo como muy verdad, porque eso es la interpretación realmente y de mi vida procuro no poner nada porque me gusta tenerla para mi (risas) y además creo que es muy difícil que mi persona conecte con cosas de los personajes que interpreto. Yo procuro analizar los personajes desde fuera, como sentiría esta persona, cómo le afectaría a él las cosas y nunca vistas desde mí, porque entonces sería como si me pasase a mi, y no, le está pasando al personaje. Yo intento recrear como le pasaría a él sin juzgar si yo estoy de acuerdo o no estoy de acuerdo con ello.

¿Tienes algún personaje que te haya marcado más?

Los personajes del perro, sobre todo Teodoro, ha sido un personaje que me ha fascinado hacer. Nosotros cada vez que hemos visto representado «El perro del Hortelano» hemos visto que Teodoro era como el galán, que está implicado en el principal historia de amor, y era un tipo que flirteaba. Nosotros hemos hecho de Teodoro una especie de galán torpe que casi no se entera de lo que le está pasando y nos parece muy divertido. A mi Teodoro me ha dado muchísimas alegrías.

Y por otro lado, recuerdo interpretar en un montaje que hice con un director que se llamaba Emmanuel Chini, un tipo de Malta que se formó Londres, un tipo muy interesante. Y montamos «La Casa de Bernarda Alba» y el elenco eran todos chicas, exceptuando  a otro chico y a mi. El otro chico hacia de Laponcio, y yo hacía de Bernarda. Entonces yo en aquel entonces que tenía 25 o 27 años que tenía, tenía que interpretar a una mujer de 60 y era yo. Yo no cambiaba la voz para hacerla femenina ni nada por el estilo. Yo salía vestido de Bernarda, pero lo que era impresionante era que según salías y empezabas a hablar, la gente se olvidaba de que fueras un hombre, la gente se metía en que eras una señora de sesenta años y eso fue muy difícil hacerlo pero a la vez muy bonito.

¿Por qué actor?

(risas) Yo empecé a hacer telecomunicaciones vale? (risas) y un día llamé a mi padre y le dije: Papá que voy a cambiar de carrera… me dijo ¿Qué vas a hacer arquitectura?… no exactamente… voy a hacer arte dramático… ¿pero de que vas a comer? (Risas) hoy por hoy está orgullosísimo, pero por aquel entonces fue muy duro. No sé exactamente por qué pero de repente fue una especie de llamada que tuve y tuve clarísimo que tenía que ser actor. Y luego ya más adelante, si que empecé a recordarme a mi mismo a lo mejor con seis o siete años de estar viendo a lo mejor con mi familia lo típico después de cenar la tele, el 1,2,3 o un programa de estos y recuerdo señalar la tele y decirle a mi madre: Yo quiero estar ahí. Pero yo no sabía ni lo que era interpretar ni nada por el estilo. Lo que pasa que a mi me viene un poco de mi madre, mi madre es muy artista. Mi madre pinta, canta y demás, nunca lo ha hecho profesionalmente pero sí, yo soy igual que mi madre, creo que de ahí ha venido la herencia artística.

Entonces la típica pregunta de ¿Un actor nace o se hace?

Debe ser las dos cosas. No creo en el talento sin trabajo ni en el trabajo sin talento. Creo que deben ser las dos cosas, creo que el talento sin más ni sirve para nada. Si tienes talento y trabajas duro puedes llegar a ser un grande, se te reconozca o no, según como estén las cosas. Pero yo si que creo mucho en el trabajo duro, en la formación, en estar entrenado, en ver mucho teatro, en leer teatro, en enterarte no sólo que se está haciendo en tu ciudad ni en tu país si no en el resto del mundo, que se está haciendo en Nueva York, en Londres, en Berlín, en Europa del Este se hace un teatro impresionante, en los países nórdicos se hace un teatro impresionante.

Yo me formé en Finlandia en la Universidad de Tampere y fue maravilloso, una ciudad con 200 y pico mil habitantes, que tiene veintitantas salas de teatro y todas funcionando a full, la gente repite una y otra vez, porque entienden que el teatro es algo vivo, que no es como si vas a ver una película que va a ver lo mismo. El teatro cada día va a fluctuar hacia arriba hacia abajo, vas a descubrir cosas nuevas y demás. Hay que estar conectado con todo lo que se hace por ahí.

¿Qué es lo que sientes antes de salir a escena?

A mi me gusta mucho mucho, sobre todo en los estrenos, oír a el público entrando en la sala, porque es como una especia de barullo, ese sonido de los pasillos… en un estreno es lo que más nervioso te puede poner. El momento antes que no sabes si va a funcionar, si cuando vas a hacer el chiste la gente se reirá o no se reirá, a mi me encanta cuando es a telón echado ponerme detrás, pegado al telón y escuchar a toda esa gente en el patio de butacas, todo ese murmullo que se escucha bastante fuerte me va directamente al estómago y me sube para el pecho y me pega un subidón… (risas) que alucino, me pone nerviosísimo, pero son unos nervios que disfruto muchísimo.

Y ya para acabar, hacemos un resumen… Ahora estás con Ay Carmela! en Madrid en el Teatro Reina Victoria…

Si, y en Junio estaremos en la Sala Garage Lumiere los lunes a las 21.30, los lunes 3, 10, 17 y 24. Todo Junio con «El Perro del Hortelano» y a la vuelta esperamos que regrese Ay Carmela! y el estreno de «Tres Sombreros de Copa».

Muchas Gracias Álvaro por todo lo que has hecho, por ser tan cercano y tan amable desde el primer momento y ponerme tantas facilidades para poder realizar esta entrevista, ha sido un autentico placer.  Felicidades por todo tu trabajo!

Añade tu comentario