Richard MacDonald, uno de los máximos exponentes de la escultura figurativa llegó el pasado 25 de abril al MEAM para exponer su arte por primera vez en la ciudad de Barcelona.
Este artista comenzó su carrera como ilustrador y trabajó para Coca-Cola o Anheuser-Busch, pero en 1983 decidió que la escultura dejaría de ser un hobby para ser su verdadera profesión. Entre sus grandes logros están la escultura de Stephen F. Austin en la Universidad de Texas y la escultura de El Flair que fue instalada para la Georgia International Plaza de Atlanta para los Juegos Olímpicos de 1996.
Además, MacDonald es el único artista que está autorizado por el Cirque du Soleil con derecho a colarse en los camerinos lo que le da un acceso ilimitado a la historia de la compañía. También está vinculado con el Royal Ballet de Londres, la primera compañía de ballet de Reino Unido y la fuente de su inspiración.
Pero este escultor también tiene un hueco para plasmar otro tipo de artes y deja a un lado a los bailarines, ha representado a niños, ancianos e incluso a las mujeres con sus diferentes etapas del embarazo. Con su lado solidario se ha centrado en la promoción de la educación artística infantil a través de diferentes organizaciones y ha brindado su apoyo a las nuevas promesas de la danza y la escultura mediante una beca para jóvenes bailarines de la Royal Ballet School de Londres y con diferentes programas de residencias en su estudio de Monterrey para escultores.
Ahora, con invitación del MEAM (Museo Europeo de Arte Moderno) y del Certamen Internacional de Danza Ciutat de Barcelona, llega a la Ciudad Condal por primera vez para exponer su obra bajo el título de The First Twenty-Five.
Este trabajo puede disfrutarse en el MEAM de Barcelona desde el 25 de Abril y permanecerá allí hasta el 15 de Junio.
