Hoy tengo la suerte de conversar con un actor polivalente y a quien hemos podido disfrutar no solo en el teatro, también en cine y en la pequeña pantalla. Hoy, se sienta en este Patio de Butacas, el actor Pepe Ocio, quien ahora mismo, se encuentra de gira con la obra ‘El Funeral’ que se encuentra establecida hasta el próximo 8 de marzo, en el Teatre Borrás de Barcelona.
Pepe Ocio ha protagonizado algunas de las obras más aclamadas por el público y por la crítica de los últimos años. Su trabajo en ‘Smooking Room’ le valió la nominación a Mejor Actor de Reparto en los Premios Unión de Actores. En la increíble ‘Lluvia constante’, recogió el relevo de Sergio Peris-Mencheta, para compartir cartel con Roberto Álamo y protagonizar este indispensable montaje bajo las órdenes de David Serrano y con quien además, volvió a trabajar el pasado año en Mérida, con ‘Metamorfosis’ junto a Concha Velasco.
En el apartado televisivo, recientemente le hemos podido ver en ‘Alta Mar’ la reciente producción de Netflix y Bambú, además de en otras ficciones como ‘Vota a Juan’, ‘Traición’, ‘Sin identidad’, ‘Las Chicas del Cable’, ‘Crematorio’ o ‘Adolfo Suárez’. Mientras, en la pantalla grande, también se ha puesto bajo las órdenes de grandes directores como José Luis Cuerda con ‘Tiempo después’, Rodrigo Sorogoyen en ‘El Reino’, ‘Camino’ de Javier Fesser o ‘La Caja Kovak’ de Daniel Monzón.
Ahora, mi invitado de hoy, alguien con quien tenía muchas de ganas de conversar y de poder aprender a su lado, vuelve a subirse a las tablas del teatro, su gran pasión, para compartir cartel con una de las más grandes actrices de nuestro país, Concha Velasco a quien siempre diré que hay que ir a ver en directo al menos una vez en la vida. Ellos dos comparten cartel con Irene Gamell, Irene Soler y Emmanuel Medina que bajo las órdenes de Manuel M. Velasco no traen ‘El Funeral’ esta comedia de éxito que no para de girar y de recoger grandes críticas.
Ahora mismo podemos disfrutarte sobre las tablas con la obra ‘El Funeral’, con la cual además ya habéis cumplido una semana en el Teatre Borrás de Barcelona. ¿Qué puedes contarnos sobre este nuevo trabajo? Es una comedia muy surrealista escrita por Manuel Velasco en la cual se cuenta en forma de parodia como en el funeral de una gran actriz de este país muy conocida se aparece su fantasma. A partir de ahí empiezan a pasar una serie de circunstancias muy surrealistas y con un final del que no puedo decir (risas).
Tu personaje en la obra ¿Cuál es?
Yo soy el representante de esta artista. Voy allí a velar el cadáver y a sacar también algún tipo de rendimiento económico que parece que es lo que hace siempre este representante y según entra se encuentra con el pastel.
Es un montaje al que te incorporaste sustituyendo a Jordi Rebellón. ¿Habías visto la obra antes de protagonizarla?
Sí, estuvo primero Antonio Resines y luego Jordi Rebellón, y yo soy el tercer representante.
Venía de cero, porque cuando estuvieron en Madrid a mi me pilló siempre trabajando y haciendo temporada de otra obra ‘Smooking Room’ y luego de gira también con esa misma función y no pude verla.
Eres protagonista junto a Concha Velasco, ¿Qué te aporta ella a tu faceta como actor?
Es la segunda vez que trabajo con ella ya. Estuve el verano pasado en Mérida con ‘Metamorfosis’ de David Serrano, y quizás lo que me aporta es que es una mujer que sabe mucho. Es una de las grandes actrices de este país, de las más grandes y de las que más saben. Lleva subida en el escenario más de 60 años.
Lo que más aprendo de ella es como cuida al público, la relación tan afectuosa que tiene con él. Y siempre dice que para ella es muy importante escuchar, porque aunque estés actuando tienes que escuchar el latido del público para darles lo que te van pidiendo. Porque el público va cambiando de día, de estado de ánimo y de todo.
Entonces quizás, lo que más (además de muchas cosas) es la relación que tiene con el público, ¡como la quieren!
Antes hablabámos de ‘Smooking Room’ y de ‘Lluvia Constante’, dos trabajo muy potentes pero que nada tienen que ver con la comedia, que es en donde te vemos ahora con ‘El Funeral’ ¿Cómo es ese cambio de registro en el teatro?
Pues es por un lado muy liberador, porque aunque con el drama también tienes que tener cierto nivel de juego, con la comedia se aumenta, con lo cual eso hace que estés en el escenario con otra relajación. Pero luego a mi también me resulta más difícil porque la comedia tiene un ritmo, tiene una respuesta muy directa con el público… En el drama si no está gustando o se están aburriendo, tú no te das cuenta porque están callados normalmente. Y en la comedia se ríen o no se ríen, y se ríen más o se ríen menos.
Yo siento que levantar una función entera de comedia, me supone mucho más esfuerzo físico y mental.
¿Acabas entonces más cansado o igual que cuando haces una obra como ‘Lluvia constante’ que requiere mucho esfuerzo físico?
Sí, sí. A ver, yo en ‘Lluvia constate’ acababa para meterme en la cama de cansado (ríe). Pero en esta también eh! llego a casa y me quedo super dormido. No me da ni para cenar.
Volviendo a ‘El Funeral’, sois cinco intérpretes en escena, si no le dieras vida a tu personaje ¿Qué otro papel te gustaría interpretar?
Pues quizás al nieto, porque es todo lo contrario. El mío es como el que se la sabe todas, es muy tirano con los otros personajes… Y el personaje que interpreta Emmanuel Medina es muy inocente… Es tan opuesto a lo que estoy haciendo ahora…
Y además de que te enfrentas a la comedia ¿en este trabajo ha habido algo en especial que te haya costado más a la hora de preparártelo?
Es parecido porque al final todos parten de una base parecida, pero sí es verdad que para mi lo más difícil de aquí tiene lo que te hablaba antes de la dificultad de mantener el ritmo siempre muy arriba y eso en la preparación hay que estar muy atento para que no caiga.
Me gustaría pedirte que por favor explicases hasta que punto en el Feedback con el público os pueda llegar a afectar las pantallas iluminadas de los teléfonos móviles, las entradas tarde a sala.. Porque creo que todavía no hay gente que es consciente realmente de lo que os puede afectar…
Yo al público lo respeto profundamente porque al fin y al cabo es quien paga su entrada y se sienta. Entonces ellos tienen derecho a que le guste o no, a aplaudir más o menos, a no aplaudir o no reírse… Digamos que ese es el intercambio que tenemos y nosotros a cambio hacemos nuestro trabajo.
Lo otro, el tema de los móviles es bastante molesto, porque nosotros estamos actuando. Por ejemplo en ‘Lluvia constante’ yo tenía monólogos a público muy dramáticos, en los que estoy muy concentrado y llorando… y de repente ver tres caras iluminadas por un móvil, la sensación de que tú te estás dejando la piel y no te están haciendo caso… o que en mitad de una escena suene un móvil y que hay gente que lo contesta… Es incómodo, pero no solo para nosotros. Yo pienso que los que están al lado de esta persona han pagado una entrada también. Cuando voy de espectador no me gusta tener pantallas iluminadas, me distraen. Y coger un teléfono me parece una falta de respeto. Es difícil.
Pero en esta obra, en la que además Concha habla mucho con el público yo no he visto ninguna pantalla iluminada.
¿Qué es lo que sientes cuando el telón empieza a subirse y las luces se apagan?
Yo prefiero empezar encima del escenario porque me pongo menos nervioso. Pero siempre antes de entrar hay un pellizquito en el estómago de nervios. Es muy pequeño, pero lo suficiente para que me de algo de nervios pero que no me impida actuar. Y una vez que entras, que ya llevas cinco minutos, no te quieres ir de allí. Pero siempre antes de entrar tienes eso de: ¿Les gustará? ¿Irá todo bien?…
Porque aunque repitas una partitura, tú entras cada día a algo desconocido. Ese día va a pasar algo que es diferente a los otros. Entonces yo creo que es ese pequeño miedo a lo desconocido.
¿Cómo te enfrentas al cambio de público cada día y el adaptarse al ritmo? ¿Improvisas ciertas cosas?
La historia no se puede cambiar y tú tienes que decir tus frases, pero sí que es verdad que si ese día ves que el público está un poco más dormido o más hablador… porque es muy curioso pero el público suele actuar en bloque, entonces sí que según lo que vas percibiendo, sobre todo si llevas muchas funciones porque estás más seguro en el escenario, intentas meterle algo de ritmo si la obra está yendo más despacio, o si ves que están muy revolucionados…
Es importante escuchar lo que está sintiendo el público para estar tú también en la misma sintonía. En el teatro eso es muy importante.
¿Qué es lo que te aporta como actor?
Yo hago bastante tele y bastante cine, pero he dejado proyectos de esas áreas por hacer teatro, le doy bastante prioridad pero lo que me aporta es bastante inexplicable. Yo cuando salgo a un escenario es como que el resto de mi día a día y de mi vida desaparecen, para bien y para mal. Sobre todo cuando es para mal. Son momentos en que yo estoy mucho más libre, más feliz. Cuando sé que ese día tengo función, todo va mejor. No es muy concreto, pero a mi me hace muy feliz.
Y luego, con el tema del personaje, el repetir, el poder profundizar cada día un poco más, es un ejercicio de investigación del personaje y del arte que a mi me eleva desde luego a otro sitio.
Y si me lo permites, aunque no tenga que ver con esta función me gustaría tocar un tema cinematográfico contigo, y como tuviste la oportunidad de trabajar bajo las órdenes de José Luis Cuerda en ‘Tiempo después’ Quería rendirle un pequeño homenaje y preguntarte ¿Qué te aportó trabajar con el maestro?
Pues era tan maestro que el me contrató para ‘Tiempo después’ después de verme en ‘Lluvia Constante’ sin hacerme prueba ni nada. Tenía tanto ojo, que el fue a teatro, vio esa obra y decidió que quería trabajar conmigo dándome un personaje que no tenía nada que ver al que había visto.
Era un hombre de una inteligencia… De las personas más inteligentes que he conocido en mi vida. Sabía mucho de muchas cosas, tenía un humor muy negro, muy divertido. Se reía mucho del mundo y de él mismo continuamente. Y hasta las frases que te decía para dirigirte eran tan ingeniosas como las del diálogo. Te decía cosas y te daba risa como te las decía.
Es una gran pérdida no solo a nivel personal, sino también para la cultura.
Para acabar, me gustaría invitarte a participar en el tipo test que realizo a todas mis invitadas y que es para conoceros un poco mejor. Consiste en que me recomiendes…
– Un libro: ‘Una educación’ de Tara Westover. Va sobre una chica educada en un lugar de mormones y no le dan acceso a la educación pero ella por suerte puede acceder. Es una historia real, es la biografía de esta chica
Y otro, ‘Ordesa’ de Manuel Vilas.
– Una película que hayas visto recientemente: ‘1917’ de Sam Mendes, me encantó.
– Una película que no olvidas: ‘El Padrino II’ de Francis Ford Coppola.
– Un cortometraje: ‘Madre’ de Rodrigo Sorogoyen.
– Una serie de TV a la que estés enganchado: ‘Fleabag’
– Una serie de TV que siempre recomiendes: ‘A dos metros bajo tierra’.
– Una obra de teatro que hayas visto recientemente: ‘Los hijos’ dirigida por David Serrano.
– Un obra de teatro que tengas pendiente de ver: Pues creo que no llego pero ‘Prostitución’ dirigida por Andrés Lima, en el Teatro Español.
Y ya para acabar, ¿Quieres decirle algo a los lectores para que vayan a ver ‘El Funeral’?
Sí! Que vengan a vernos y como Concha dice: Que mejor despedida de una carrera que poner sobre el escenario tu propio velatorio y saber quienes van a ir y qué van a decir. (ríe).
‘El Funeral’ permanecerá en el Teatre Borrás de Barcelona hasta el 8 de marzo para posteriormente continuar su gira. Y como ya sabéis, intentaré informaros de las diferentes paradas y fechas para que no perdáis la ocasión de disfrutarla.
** Foto: pendiente de autoría **
